Un medicamento consigue modificar la inmunidad del paciente con diabetes |
Según los expertos, probablemente la explicación radique en que ambos trastornos son autoinmunes. Es decir, en el caso de la diabetes, por una especie de 'error', el sistema inmunológico ataca a las células productoras de insulina (las beta-pancreáticas) y, por lo tanto, se produce una deficiencia de insulina y una incapacidad para regular el azúcar en la sangre.
En los pacientes con psoriasis, lo que ocurre es que, también por un fallo en el sistema inmunológico, se produce una desregulación de linfocitos T (encargados de luchar contra las bacterias, los virus y otros organismos responsables de enfermedades) y una parte de estos ataca a células sanas de la piel como si se tratara de una herida o una infección.
Entre el arsenal terapéutico existente para tratar esta enfermedad cutánea destacan los llamados fármacos biológicos, uno de ellos el alefacept, "capaces de bloquear las interleuquinas implicadas en la inflamación producida por la acción de los linfocitos T", explica Raúl de Lucas, dermatólogo del Hospital La Paz de Madrid. En este punto, cabe matizar que alefacept es uno de los primeros biológicos comercializados y, aunque en EEUU se sigue indicando para la psoriasis, "en España sólo se utilizó inicialmente como uso compasivo para la psoriasis grave o severa y, desde que salieron los nuevos biológicos con indicación para el tratamiento de la psoriasis, alefacept prácticamente no se usa para nada (sólo si fracasan los biológicos habituales)".
Inmunosupresores para la diabetes