Por encima de otras muchas cualidades, lo que más valoran las compañías farmacéuticas en sus responsables senior son la adaptabilidad, la autogestión eficaz y el autodesarrollo, tal y como han coincidido en señalar tres altos ejecutivos en el campo de los Recursos Humanos del sector farmacéutico en la jornada “Competencias clave del profesional senior en el sector farmacéutico”, organizada por Pharma Talents y Nexus Executive Search.
Precisamente el sector farmacéutico es uno de los que más cambios organizativos y gestión de conocimiento ha experimentado en los últimos años, fruto no sólo del impacto de la crisis y de las medidas regulatorias, sino también de las nuevas necesidades de las compañías. En un contexto profesional que reconoce el emprendimiento y el indudable valor del joven profesional, son muchos los talentos senior que están en búsqueda activa de trabajo, en transición a nuevas áreas o en pleno proceso de adaptación a los nuevos requisitos del sector.
Experiencia frente a iniciativa.
La edad no es una barrera laboral, pero ante a la descapitalización del talento de los profesionales más experimentados, resulta fundamental reevaluar el bagaje de fortalezas y debilidades para adaptarnos al entorno. Según Enrique Rodríguez Balsa, director de Recursos Humanos de Servier y uno de los ponentes del evento, “En esto consiste precisamente la autogestión eficaz, en potenciar aquello que sabemos que hacemos bien, para seguir cultivando nuestras fortalezas, y analizar lo que se nos da peor, para reforzarlas y mejorar en el futuro”.
Para Llanos Verdú, manager Global Recruiting Spain & Portugal de Johnson & Johnson: “La adaptabilidad es una competencia esencial tanto para la vida profesional como personal. De ella depende que veamos en los cambios un reto infranqueable o una oportunidad para seguir creciendo profesionalmente. Cuanto más desarrollada tenga una persona esta habilidad, menos sufrirá ante los cambios y con más facilidad logrará los resultados”.
Esta idea coincide con la experiencia de Arancha García como Head of Talent & Organisational Development Iberia de Sanofi, para quien toda competencia parte de la actitud y responsabilidad del profesional. ”La clave está en trabajar el autodesarrollo, puesto que todas las competencias y necesidades profesionales se pueden desarrollar y trabajar. Esta competencia aporta beneficios tanto para la empresa, como para el colaborador y el manager: mejora los resultados e imagen corporativa, potencia las actitudes y aptitudes, incrementa la adaptabilidad, así como el rendimiento y los resultados. Acumular antigüedad no es lo mismo que aprender de la experiencia”.
Fuente: Equipos & Talento
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