La farmacéutica, cuya exclusividad para vender Lipitor en EE.UU. está por vencer, pone la mira en los mercados emergentes
No hay tiempo que desperdiciar. Pfizer está a punto de perder en Estados Unidos la protección de la patente para su producto más vendido, Lipitor, la píldora que combate el colesterol y que contribuyó con US$10.700 millones a los US$67.800 millones en ventas globales que la compañía registró el año pasado.
Para aliviar el impacto sobre Pfizer, Read ha comenzado a reducir costos, incluso está pensando en recortar el presupuesto dedicado a investigación y desarrollo de US$8.100 millones anuales a US$6.500 millones. También ha puesto en la mira una reorganización. La compañía recientemente vendió por US$2.400 millones una división que fabrica medicamentos en cápsula.
Los inversionistas han respondido positivamente: las acciones de Pfizer alcanzaron en febrero su nivel más alto en 52 semanas luego de que la compañía anunciara su reestructuración y planes de recomprar acciones por US$7.000 millones este año.
Sin embargo, muchos todavía ponen en duda que Pfizer tenga la combinación adecuada de productos ya en venta y en etapa de desarrollo como para mantener sus ingresos o crecer. Aunque la compañía cuenta con obtener un significativo crecimiento fuera de EE.UU., también está enfrentando presiones en países como China para reducir los precios de los medicamentos.
En una reciente entrevista, Read expresó confianza en que el gigante farmacéutico está en camino al crecimiento y sostiene que la expiración de la patente de Lipitor no es tan preocupante para el futuro de la compañía como podría parecer.